Alta dirección y Brasil 2014: Argentina
Mucho puede aprender la alta dirección de lo que ocurre en los grandes eventos deportivos, como es el caso del Mundial de fútbol disputado en Brasil en 2014.
A continuación presentamos la segunda reflexión, relacionada con algo que no ocurría desde 1990: Argentina finalista.
El equipo de Puente Empresarial.
ARGENTINA EN BRASIL 2014: GRANDES JUGADORES, EQUIPO EN FORMACIÓN.
Antes de comenzar la Copa del Mundo Brasil 2014, la prensa internacional mencionaba como candidatos a Alemania, España, Italia, Holanda, Brasil y Argentina. Curiosamente, la prensa argentina no era tan optimista en cuanto al desempeño del equipo de su país. ¿Por qué esta diferencia de opinión?
Había argumentos a favor de aquellos que consideraban a Argentina como candidato:
– Grandes estrellas reconocidas mundialmente, tales como Messi, Agüero, Mascherano, Higuaín, Lavezzi, Gago, Di María, etc.
– Una buena eliminatoria, encabezando la tabla de posiciones.
– El evento se jugaba en un país vecino.
– Los rivales que le tocaron para la fase de grupos tenían escasa trayectoria mundialista.
Por otro lado, la opinión pública argentina consideraba que también había fuertes argumentos en contra:
– Grandes jugadores, pobre trabajo en equipo.
– Gran poder ofensivo, pero defensivamente débil. Hay quienes decían que se iban a convertir y recibir muchos goles, y no estaba claro de cuáles habría más.
La fase de grupos pareció darle la razón a los pesimistas. Iniciativas aisladas de Messi le dieron la victoria en los tres partidos y Nigeria le convirtió dos goles con una facilidad preocupante.
Otra fue la historia en la fase de eliminación. Messi estuvo muy controlado por los rivales y fue necesario que apareciera el juego de equipo y el esfuerzo conjunto para ganar cada partido.
En la fase de eliminación las estrellas no brillaron tanto y apareció el juego de equipo. Hubo esfuerzos mayúsculos por apoyar al compañero que estaba en aprietos. Las estrellas dejaron de lado el lucimiento personal para subordinarse al esfuerzo colectivo.
Se llegó nuevamente a una final, en la cual los jugadores argentinos dieron un gran partido y fueron superados por otro gran equipo. Alemania era un equipo desde el inicio del Mundial, el equipo argentino se formó partido tras partido.
La evolución que tuvo la selección de Argentina en Brasil 2014 pone de relieve una vez más tres aspectos fundamentales que la alta dirección debe tener siempre en cuenta:
1) El máximo desempeño de un equipo no es igual a la suma de los máximos desempeños individuales.
2) Compartir una visión es clave para que cada individuo deje en segundo lugar su interés personal.
3) Un sueño es mucho más motivante que cualquier recompensa monetaria.
Héctor D. Debernardo.