Alta dirección y Brasil 2014: Reflexión final
Mucho puede aprender la alta dirección de lo que ocurre en los grandes eventos deportivos, como es el caso del Mundial de fútbol disputado en Brasil en 2014. A continuación presentamos la reflexión final, que resume de todas las anteriores.
El equipo de Puente Empresarial.
BRASIL 2014: REFLEXIÓN FINAL PARA LA ALTA DIRECCIÓN.
Como ya se expuso en los artículos previos sobre la Copa Mundial de Fútbol Brasil 2014, las selecciones de España, México, Colombia, Argentina y Alemania dejaron importantes enseñanzas para la alta dirección.
De España aprendimos que, como comentó el Dr. Ángel Baguer Alcalá, se puede garantizar el fracaso con una deficiente planificación a nivel corporativo (La Federación Española de Fútbol), falta de liderazgo del director general (El entrenador), mantener durante años la misma estrategia (El estilo de juego tiki-taka) y contar con personal con actitud egocéntrica y sin hambre de triunfo (Los jugadores).
De México cabe destacar la importancia del líder en un equipo de trabajo (El entrenador) y que no se puede dar por logrado un objetivo antes de ser alcanzado. Como se dice en el argot popular, “el juego no acaba hasta que acaba”.
Colombia nos recordó que es necesario creer en uno mismo para triunfar. Un verso de la canción “Color esperanza”, de Diego Torres, sintetiza muy bien este concepto esencial para la alta dirección: “Creer que se puede, querer que se pueda”.
La evolución que tuvo Argentina pone de relieve una vez más tres aspectos fundamentales que la alta dirección debe tener siempre en cuenta: el máximo desempeño de un equipo no es igual a la suma de los máximos desempeños individuales, compartir una visión es clave para que cada individuo deje en segundo plano su interés personal, y un sueño es mucho más potente que cualquier recompensa monetaria.
Finalmente, Alemania, el campeón, nos demostró que la organización, planeación a largo plazo y enfoque en lo importante son una combinación de ingredientes ganadora que simultáneamente permite ser socialmente responsable.
La alta dirección, y en particular el Fútbol Latinoamericano, tienen mucho que aprender de Brasil 2014. Estamos en la era del Conocimiento y ya no podemos seguir improvisando.
Héctor D. Debernardo.